A mi perro no lo cambio por nada

Autora: Victoria Dordyay Fedoruk
Curso: 4º C
Habia una vez un padre, su hija y un perro que era de ellos. Estaban dando un paseo por el paseo marítimo y de pronto la hija recordó que todas sus amigas tenian un videojuego y ella no lo tenia, entonces le preguntó a su padre :
- ¿Papi, me compras el videojuego que tienen mis amigas? Todas mis amigas lo tienen.
El padre contestó:
- Si quieres que te lo compre, devolvemos tu perro ¿qué eliges?
Celia se quedó pensando y respondió:
- Mi perro, porque me lo paso mejor con él y además ninguna de mis amigas tiene perro.
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